Reflexiones para jóvenes y adolescentes hoy nos ayuda a ver que es muy común la situación del joven o adolescente cuando llega a un nuevo grupo y no sabe que hacer para encajar en el, pues los jóvenes siempre necesitamos tener amigos pero muchas veces pueden llevarnos por caminos equivocados haciendo lo malo solo para ser aceptados por ellos.
¿Te has preguntado por qué
tus amigos en ocasiones ejercen tanta influencia ¿sobre ti? En el fondo es
porque, al igual que otros jóvenes, no deseas ser rechazado. La experiencia de
Randy, según cuenta Josh McDowell, es un claro ejemplo de la presión que todo
adolescente se ve obligado a enfrentar casi a diario.
Randy se acababa de mudar
a un nuevo vecindario. Como ocurre en estos casos, por un tiempo se encontró
sin amigos. Desesperado por «encajar» en el grupo comenzó por aceptar un
cigarrillo, aunque él no fumaba. Mientras conversaba con los muchachos, dejaba
que el cigarrillo se consumiera entre sus dedos, simulando fumar.
Cuando sus amigos se
enteraron de que en las tardes Randy se quedaba solo en su casa, lo
convencieron para que les permitiera reunirse allí, aunque él sabía que sus
padres se lo habían prohibido. Un día uno de sus amigos llevó una caja de
cervezas y Randy permitió que bebieran y fumaran en su casa.
La gota que rebosó el vaso
se produjo cuando Randy fue arrestado por robar mercancía de una tienda. Sus
amigos le dijeron que si no se atrevía, lo considerarían un cobarde, y él les
quiso demostrar que no lo era. Cuando fue arrestado por el personal de
seguridad de la tienda, sus «amigos» huyeron y lo dejaron solo con su problema
(Manual de consejería para jóvenes], p. 146).
¿Qué hacer, entonces, para
resistir el poder del grupo? En su libro Stand up (Mantente firme), el escritor
Bill Sanders hace varias sugerencias:
1. Define cómo te percibes
a ti mismo. ¿Te consideras un ser valioso, creado a la semejanza de Dios, o un
títere de los demás?
2. Escoge bien tus
amistadas.
3. Formúlate algunas
preguntas importantes. Por ejemplo: ¿Me sentiré bien conmigo mismo después de
hacer esto? ¿Haría esto si mis padres estuvieran aquí? ¿Me gustaría que este
hecho apareciera en el periódico? ¿Tendré un mejor futuro si lo hago?
Sanders afirma que si
cualquiera de las respuestas a estas últimas preguntas es no, entonces la
actividad propuesta por el grupo no es buena.
Más importante aún, no son
amigos quienes te presionan a hacer lo malo. Los verdaderos amigos te ayudan a
ser mejor persona, no peor.
"Vivan de manera digna del Señor; Agradándole en todo" (Colosenses 1: 10, NVI)
Oración: “Señor, capacítame para hacer lo que te
agrada a ti, no lo que agrade a los demás”.
Tomado de Matutina “Dímelo
de Frente” - Por: Fernando Zabala